A tan sólo 2 días de haber llegado a Alicante después de mi gira por Uruguay, salimos nuevamente rumbo a Madrid para el concierto infantil interactivo que daríamos en 2 funciones durante el fin de semana en el Teatro Gurdulú.
Guitarras, teclado, soportes, cables, ropa, discos, materiales para las dinámicas, etc, etc, etc... cada concierto infantil, una mudanza!
Esta vez salimos más temprano para no llegar por la noche y cuidarnos de no volver a agarrarnos la gripe como la última vez, así que un poco antes de las 10 de la noche, ya estábamos tocando el timbre de nuestra familia amiga en Madrid quien nos hizo un huequito para pasar el finde.
MIL GRACIAS (otra vez), MANOLO y CARMEN!
Al otro día (el sábado), partimos después de comer rumbo a Leganés, un pueblo a 30 minutos de donde nos alojamos y donde se encuentra el Teatro Gurdulú.
Llegamos sin problemas a la hora prevista y para facilitarnos aún más las cosas, Angela nos esperaba en la puerta guardándonos lugar para aparcar y bajar todos los petates.
Montamos todo en tiempo récord y tuvimos tiempo hasta de hacernos unas gárgaras ya que aún no nos acostumbramos a pasar del clima húmedo de Alicante al clima seco de Madrid.
Un poco antes de las 6 de la tarde, ya sabíamos que las entradas estaban agotadas, así que a los pocos minutos de que dieran sala, esto fue lo que se escuchó detrás de bambalinas:
Pichu es la encargada de "cortar el hielo" y con su presentación, no hay nadie que se le resista.
A partir de entonces al ambientazo fue impresionante y tanto Pichu como yo, disfrutamos el concierto a tope.
Y como siempre, con el protagonismo de los más pequeños:
Salimos tan contentas y confiadas que cometimos la primer novatada: nos perdimos!
Ya nos parecía raro demorar tanto cuando de repente nos encontramos un cartel de esos verdes que te avisan cuando cambias de provincia... "Bienvenidos a la Provincia de Toledo"!!!! ¿Pe-pero, cómooo?
Al final, en lugar de 30 minutos nos demoramos 2 horas y media! en regresar a destino...y menos mal que fue a la vuelta... si nos hubiera pasado a la ida podíamos haber llegado tarde a nuestra primera función! Qué papelón!
En fin, para el día siguiente ya sabíamos que teníamos un poco más de medio aforo reservado, así que cruzamos los dedos para que con un poquito de suerte se volviera a llenar y salimos más temprano por si nos volvíamos a perder... algo que volvió a suceder! pero por suerte, nos dimos cuenta a tiempo y llegamos justo justo! Qué estrés!
La buena noticia llegó jutso a tiempo con nosotras: otro lleno! Qué emoción!
Hasta la próxima Madrid! Ojalá qué se repita pronto!
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